Entre la noche del 23 y la madrugada del 24 de enero se produjeron los combates finales en los cuarteles de La Tablada. En los enfrentamientos a escasos metros de distancia, casi cuerpo a cuerpo, ofrendaron sus vidas en defensa de la Patria y las instituciones el teniente Ricardo Alberto Rolón y el sargento Ramón Wladimiro Orué